GALLEANDO

Una gran Feria para recuperar un gran abono

0
2947
Aspecto de la Maestranza llena cada día de Feria, foto ya del pasado.
Aspecto de la Maestranza llena cada día de Feria, foto ya del pasado.

«…Pocos se sentirán insatisfechos pese a ser cierto que faltan nombres injustamente olvidados. Sin embargo, lo que merece destacarse del gran ciclo es lo que da a entender, que el toreo, en cada uno de sus carteles, aflora por los cuatro costados. Sólo queda esperar a lo que ‘decida’ el toro…»

Manuel Viera.-

     Parecen carteles propios de los sueños o quizás también de la acumulada experiencia de quien los hizo. O tal vez elaborados motivado por la apremiante necesidad de recuperar al abonado perdido. Cuidadosamente mezclados para que ilustren el argumento de una importante y excepcional Feria de Abril. Sin duda, la totalidad de las combinaciones del gran ciclo sevillano y temporada de 2017 en la Maestranza son un caro regalo con brillante contenido.

     Pero la excepcionalidad de esta Feria está en el renovado intento por rescatar al apuntado a la programación completa huido en las últimas temporadas. Desde esta perspectiva y posibilidad dejan de ser no más de cuatro o cinco carteles de postín, que invitaban al lleno en exclusivos días, para convertirse en razón interesada la indiscutible calidad de un ciclo planificado de lujo desde el primer festejo hasta el último. Así planteado, cada una de las corridas de toros programadas incita a la asistencia a la plaza sin excusa. Sentido y consistencia para un abono que con urgencia se hace necesario repescar.

     Es la ilusionante propuesta que en esta extraordinaria Feria de primer nivel plantea Pagés. Pocos se sentirán insatisfechos pese a ser cierto que faltan nombres injustamente olvidados, y a los que considero con sobrados méritos para ser anunciados en la plaza de toros de Sevilla. Quizás muy pocos. Incluso dos, tres, no más. Pero los suficientes para hacer coherente la incoherencia de su ausencia.

     Sin embargo, lo que merece destacarse del gran ciclo de abril, metido en mayo, es lo que da a entender, que el toreo, en cada uno de sus carteles, aflora por los cuatro costados. Sólo queda esperar a lo que ‘decida’ el toro. El toro óptimo o detestable. El toro de nuestros temores, el que desvaída la imagen de la Fiesta. El toro parado que se desfonda donde sólo caben encastadas y bravas embestidas. Pese a que se haya buscado lo mejor del campo bravo. Pero ya se sabe, el toro es un enigma que sale a la plaza sin ‘ensayar.


NOTICIAS RELACIONADAS


*Manuel Viera es redactor y responsable de las crónicas de Sevilla Taurina. (manuelviera.com)

Dejar respuesta

dos × 3 =