Abandono de una fecha clásica

Zancadillas a la corrida del 15 de agosto

0
1386

«…¿Por qué se ha puesto a las ocho y no a las diez, como estaba previsto para el domingo 14? Todos los jueves de julio se han celebrado las novilladas de promoción a las diez de la noche y al día siguiente había que trabajar, y no por eso no ha ido la gente. ¿Por qué no se puede hacer lo mismo el lunes 15 y dar la corrida a las diez de la noche? ¿Por qué?…»

Francisco Mateos.-

     De verdad que hay cosas que no termino de entender. Posiblemente exista algún motivo que se me escape, ya que no puedo hacer estas preguntas directamente a los responsables; no porque yo no quiera, sino porque no me dejan. Me estoy refiriendo a varios aspectos de la corrida de toros del 15 de agosto, la corrida de la patrona de la ciudad, la Virgen de los Reyes. A nadie se le escapa a estas alturas que esta corrida (bueno, y todo el mes de agosto, en el que hasta hace unos años se daban uno o dos festejos más) ha quedado en el olvido para la empresa, un mero trámite obligado a cumplir. La empresa estaría encantada de eliminarla del calendario taurino sevillano, pero el saliente teniente de hermano mayor de la Maestranza, Alfonso Guajardo-Fajardo, dijo claramente sobre la posibilidad de eliminar este festejo que “mientras yo sea el teniente, habrá toros el día de la patrona de Sevilla”. Habrá que esperar ahora a que el nuevo teniente se pronuncie sobre esta cuestión.

     Al margen de ello, los pasos que da la empresa año tras año parecen que van siempre en la dirección de restar ganas de asistir, en vez de lo contrario, porque, al menos yo, no entiendo las siguientes actuaciones.

     Ya es conocido el baile de fechas de la empresa y su ‘olvidadiza’ memoria año tras año de que suele haber fútbol en mayúscula sobre esa fecha: que si el 14 por la noche, que si anuncio los toreros pero no la fecha, que si ahora la cambio al 15 pero mantengo la hora, que si le cambio la hora,… Idas y venidas con un cartel de toreros de la zona en situación de merecer (una cartel baratísimo, para entendernos) que parecen jugar a despistar al personal; o al poco personal interesado en ir, más bien.

     La política de precios no es proporcional. Es verdad que el espectáculo taurino es costoso, pero pedir 70 euros en plena crisis y en pleno mes de agosto en una Sevilla que se derrite por las tardes para ver a Nazaré, Agustín de Espartinas y Miguel Ángel Delgado por un tendido de sombra estaremos de acuerdo que es una invitación casi a no asistir. Porque además de los 70 euros, son los dos euritos de la almohadilla para amortiguar el duro y recalentado ladrillo maestrante y el puyazo y estocada a la cartera por un par de latas de refrescos de los repartidores de la plaza para evitar tener que ser asistidos por la Cruz Roja por deshidratación.

     La corrida estaba pensada para el domingo 14 a las diez de la noche. Es una buena idea adelantarla a la noche previa a la procesión de la patrona. Primero, porque ya de por sí, que sea de noche, pone algo más de cuerpo a asistir, con el calor algo menos agresivo. Además, se deja abierta la posibilidad de asistencia de un perfil de aficionado muy concreto. Me refiero al matrimonio sevillano que está de veraneo por las playas de Cádiz y Huelva, pero que son devotos de la patrona de Sevilla (que se cuentan por miles) y se levantan muy temprano el día de la procesión para regresar a Sevilla, asistir a la procesión y estar de vuelta a la playa para el almuerzo. Ubicando la corrida en la noche previa, el mismo matrimonio puede perfectamente plantearse el plan de regresar ‘con la fresquita’ a Sevilla la tarde anterior, ir a los toros de noche, cenar al salir, dormir en casa en Sevilla y al día siguiente asistir a la procesión temprano y de nuevo a la playa para almorzar.

     Este año ha sido imposible ubicarla la noche anterior, aunque la empresa llegó a anunciarla, porque coincide con un partidazo galáctico en la tele, Lo que no llego a entender es por qué se ha variado de hora. Es decir, si estaba anunciada el domingo 14 a las 10 de la noche, entendemos que se traslade al día siguiente para evitar la coincidencia futbolera, pero ¿por qué se adelanta de las diez a las ocho? ¿Por qué? Con ello, al que está en Sevilla ese fin de semana se le pueden quitar las pocas ganas por que el sol va a apretar aún de lo lindo. Pero hay más, y pongamos ejemplos.

     Imaginemos un aficionado sevillano que está de veraneo en Chipiona o Matascañas con la familia. El hombre lo tenía ya todo preparado: «El domingo 14, después de la playa por la tarde con mi mujer y los niños, llego al apartamento, me ducho, me visto, me tomo una cervecita a las ocho, y a las ocho y media, que ya está la familia organizada en el apartamento, me cojo el coche y llego a las nueve y media al aparcamiento del Paseo de Colón. Aparco, veo la corrida y nada más acabe estoy de regreso y a la 1:30 ya estoy de nuevo en la playa».

     Pues ahora no, porque al pasarla al domingo –obligado por el fútbol- pero adelantarla a las ocho de la tarde, el mismo aficionado ya se verá obligado a quedarse sin playa por la tarde, se irá con todo el calor del mundo sobre las 5 o 6 de la tarde, y además se tendrá que tragar todo el colapso de la operación retorno de un fin de semana largo de tres días festivos, y hasta de cambio de quincena. Vamos, que ya se le han quitado las ganas. ¿Por qué se ha puesto a las ocho y no a las diez, como estaba previsto para el domingo 14? Todos los jueves de julio se han celebrado las novilladas de promoción a las diez de la noche y al día siguiente había que trabajar, y no por eso no ha ido la gente. ¿Por qué no se puede hacer lo mismo el lunes 15 y dar la corrida a las diez de la noche? ¿Por qué?

     Y ya el remate, que aunque es un detalle no deja de ser una muestra más de las ‘enormes facilidades’ que ofrece siempre la empresa Pagés a sus clientes fijos: los abonados. Siempre pensando en ellos sin duda, ‘facilitándoles’ las cosas. Y es que aquel abonado que quiera ocupar su misma localidad en este festejo del 15 de agosto, sólo podrá hacerlo el domingo 14, de diez a dos del mediodía. Es decir, que un abonado que hoy viernes a la salida del trabajo se vaya con la familia el fin de semana a la playa, deberá regresar por la mañana del domingo para retirar la localidad de su asiento de abono, regresara la playa, y al día siguiente perderse la tarde completa de playa para llegar a tiempo a las ocho a ver la corrida, teniendo que preveer tiempo necesario para desembarcar en casa equipajes y familia del fin de semana, y sabiendo que le espera unos asientos maestrantes reconvertidos en verdadera sauna finlandesa… Ya que la empresa va a poner a un empleado media jornada en la taquilla para el abonado que quiera su localidad para esta corrida fuera de abono, ¿no sería más lógico que se hubiera dispuesto para ayer jueves por la tarde? Así, la hubiera recogido este abonado, y se hubiera marchado a la playa ya con su entrada en la mano.

     En definitiva, con las actuaciones de la empresa Pagés en los dos últimos años, al menos yo concluyo que está poniendo todas las piedrecitas posibles para que la plaza se quede casi vacía el 15 de agosto y los maestrantes se decidan ya a eliminar esa fecha. De seguir este trato a esta corrida tan sevillana por parte de la empresa Pagés, yo prefiero que la eliminen del calendario.


NOTICIAS RELACIONADAS

Dejar respuesta

seis + 15 =