Los 'wassap' de la impotencia de Hipólito

Los toreros de ‘abajo’ también se rebelan contra las formas de Canorea

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Los dos últimos mensajes enviados el pasado viernes por Hipólito (apoderado de Miguel Ángel Delgado) a los móviles de Eduardo Canorea y Ramón Valencia, también sin respuesta.
Los dos últimos mensajes enviados el pasado viernes por Hipólito (apoderado de Miguel Ángel Delgado) a los móviles de Eduardo Canorea y Ramón Valencia, también sin respuesta.

El torero sevillano Miguel Ángel Delgado y su apoderado Hipólito se encuentran hundidos y abatidos por quedar excluido un año más de Sevilla, sin tener la oportunidad de ser ni tan siquiera recibidos ni oídos. Hipólito denuncia el tratamiento recibido, sin contestación tras decenas de llamadas, mensajes y visitas casi diarias a las oficinas. En próximos días explicarán el trato recibido de forma detallada.

Francisco Mateos.-

     Fue El Juli (uno de los integrantes del grupo de cinco figuras que decidieron dejar de torear en las plazas que gestionaran Eduardo Canorea y Ramón Valencia) el que denunciaba en alguna declaración que si a ellos -a las figuras- los trataba con esas formas y sin el debido respeto, se podría imaginar cómo tratarían -los empresarios de la Maestranza- a los toreros que, por su situación más inferior, no pudieran hacer nada para reclamar respeto.

     Pues si las figuras del toreo como José Tomás, El Juli, Morante de la Puebla, Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante alzaron el ‘¡Basta ya!’ a los empresarios de la Maestranza por las formas y lo que entienden falta de respeto, decidiendo no torear más en la plaza que gestionan -Sevilla-, esos toreros ‘de abajo’ parece que también se están cansando de las formas de los empresarios. El año pasado era el sevillano Oliva Soto -que este año sí podría entrar en los carteles- el que realizaba fuertes declaraciones de dolor al verse fuera de los carteles de Sevilla y sus partidarios tomaron la Puerta del Príncipe con pancartas que provocaron hasta la presencia policial. También Manolo Cortés, apoderado de Pepe Moral -que finalmente entró en cartelería- expresó con duras críticas a la empresa su malestar por el trato recibido. Este año, de momento, es otro torero sevillano, Miguel Ángel Delgado, el que va a levantar su voz alta y clara para explicar cómo ha sido tratado por los empresarios de la Maestranza.

     Miguel Ángel Delgado no torea en la Maestranza desde agosto de 2011, justo cuando dejó de ser apoderado por Manuel Tornay y Santi Ellauri -apoderados de El Cid y Lama de Góngora, y ligados al equipo de campo de la plaza-. En Sevilla fue ‘Triunfador’ de las novilladas de promoción y también triunfó como novillero con picadores. Lleva varias temporadas reclamando un puesto. Este año está apoderado por un taurino templado y reconocido como es Hipólito, que en temporadas anteriores apoderó a Esaú Fernández. Sin embargo, hasta esa habitual templanza de Hipólito está siendo tambaleada por las formas de los empresarios sevillanos.

     Hipólito ha avanzado a SEVILLA TAURINA que esta semana distribuirá un comunicado tanto suyo como de su torero Miguel Ángel Delgado explicando «la falta de respeto de la empresa de Sevilla hacia la persona del torero sevillano Miguel Ángel Delgado y la mía propia. Creo que ambos merecemos un mínimo respeto». Según Hipólito, «los intentos por contactar con los empresarios sevillanos, día tras día durante más de un mes, han sido para nada. Decenas de llamadas mías y del propio torero. Casi un mes visitando prácticamente a diario la empresa y en ningún momento me han atendido… ¡Ya está bien! Miguel Ángel Delgado ha sido triunfador en Sevilla sin picadores y con picadores; de matador, un toro le atravesó el muslo…Todas las cornadas valen lo mismo, ¿verdad?», agrega impotente.

     La desesperación e impotencia de Hipólito ha sido tanta que reconoce que «estuve en la puerta de su casa -de Eduardo Canorea- el pasado viernes, hasta las doce de la noche, y menos mal que no lo ví…», comenta en su angustia y crispación por no poder tener la posibilidad, a lo largo del último mes, de ser al menos recibido y oido una vez por los empresarios de la Maestranza.

LOS ‘WASSAP’ A CANOREA Y VALENCIA

     El propio Hipólito ha cedido a SEVILLA TAURINA dos ‘wassap’ de texto enviados el pasado viernes 27, pasadas las 22 horas, tanto a Eduardo Canorea como al móvil de Ramón Valencia. El mensaje desesperado enviado por Hipólito a Canorea dice: «Eduardo, yo creo que me merezco el respeto de por lo menos que me cojas el teléfono. Hipólito». El apoderado de Miguel Ángel Degado, que a pesar de la indiferencia desde semanas atrás en todo momento trata de forma muy respetuosa al empresario de la Maerstranza, hace referencia a las varias llamadas realizadas sin que Eduardo Canorea ni siquiera le haya respondido alguna ni devuelto la llamada. Tampoco a este ‘wassap’ de texto del pasado viernes le ha contestado.

     Cuatro minutos más tarde de ese mensaje enviado al móvil de Canorea, envía otro a Ramón Valencia. En esta ocasión incluso le da tratamiento de ‘don’, con mayor respeto: «Don Ramón, llevo toda la tarde intentando hablar con vosotros, creo que al menos me merezco el respeto de que me atiendan. Hipólito». El taurino sevillano se identifica también en este mensaje y le recuerda nuevamente a Ramón Valencia la multitud de llamadas realizadas, sin ser ni siqiuera atendidas, a la vez que pide un mínimo respeto para ser recibido al menos una vez y ser oído. Tampoco este mensaje de texto enviado el viernes a Ramón Valencia ha sido contestado.

     Tanto Hipólito como su torero, el sevillano Miguel Ángel Delgado, se encuentran hundidos y abatidos por no tener ni siquiera la oportunidad de ser oídos una sola vez por parte de los empresarios sevillanos, por lo que entienden que quedará excluido un año más de los carteles de la Maestranza. Por eso han decidido dar un paso adelante y exponer de forma clara y transparente en los próximos días el tratamiento recibido, sin miedo a las posibles consecuencias, en una actitud similar a la tomada por las figuras del toreo, aunque en una posición de presión diametralmente opuesta.


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