Tanto la delegada de la Junta de Andalucía en Sevilla, Carmen Tovar, como el director general de Espectáculos de la Junta, Luis Partida, siguen manteniendo un inquietante y cómplice silencio, un año después, sobre lo ocurrido en el ‘caso Zalduendo’ en la Maestranza, pese a las pruebas documentales y gráficas ofrecidas por SEVILLA TAURINA.
Francisco Mateos.-
Dentro de unos días, a finales de este mes de septiembre, se cumplirá un año desde que se perpetrara en la Maestranza uno de los mayores escándalos de las últimas temporadas: el ‘caso Zalduendo’. La corrida fue un auténtico despropósito, con toros rechazados, necesitando toros de otros hierros, tres sobreros,… SEVILLA TAURINA comenzó una investigación, descubriendo -entre otros sorprendentes aspectos- que se llegó a lidiar un toro, marcado con el número 91, que había sido rechazado un mes antes en la plaza de Bilbao al despitorrarse el pitón derecho en los corrales vascos. Inexplicablemente, ese toro llegó supuestamente ‘limpio e íntegro’ a los corrales maestrantes un mes después, sin que ninguno de los tres veterinarios –que desconocían que había sido rechazado en Bilbao- observasen anomalía alguna o indicios de manipulación en sus astas. El toro fue calificado como ‘apto’ y saltó al ruedo. Ninguna de las astas de esta escandalosa corrida se remitieron a análisis post-mortem.
La propia directora general de Espectáculos del Gobierno Vasco remitió un certificado a SEVILLA TAURINA en el que indicaba la lesión producida en el cuerno derecho. SEVILLA TAURINA, posteriormente, publicó una foto-detalle de la cabeza del toro en el ruedo de la Maestranza, en la que se observa que precisamente el pitón derecho es ostensiblemente más corto que el derecho.
La Unión Taurina de Abonados de Sevilla, a raiz de las noticias y pruebas publicadas en exclusiva por SEVILLA TAURINA, solicitó formalmente a la delegada de la Junta de Andalucía, Carmen Tovar, que iniciase una investigación sobre los hechos. La polémica delegada de la Junta de Andalucía, que hasta ese momento –como es habitual en ella en temas taurinos- no se había interesado lo más mínimo por este asunto, se vio obligada finalmente a iniciar una investigación pasado más de un mes de la escandalosa corrida.
Desde entonces, y cuando se está a punto de cumplir un año del escándalo del ‘caso Zalduendo’ en la Maestranza, ni la delegada de la Junta de Andalucía, Carmen Tovar, ni el propio director general de Espectáculos de la Junta, Luis Partida, se han atrevido a informar sobre qué ocurrió, por qué sucedió, y qué actuaciones y medidas se han tomado al respecto. Es una prueba más de la dejadez y falta de interés actual de la Junta de Andalucía respecto a la Fiesta de los toros debido a la entrada de nuevos políticos despreocupados realmente por esta materia.
