Ramón Valencia ha realizado una valoración de la Feria de Abril. Balance positivo en el plano artístico, pero muchas quejas sobre la afluencia de público. Afirma que el público sigue sin responder al nivel de los carteles ofrecidos, y no es optimista. Tampoco es optimista respecto a ofrecer toros el 12 de octubre.
Manuel Viera.-
Como es habitual en los últimos años, durante la presentación del ciclo de novilladas de promoción nocturnas en la Maestranza, el gerente de Pagés, y a preguntas de los periodistas, hace su valoración de la temporada de abono en la plaza de toros de Sevilla, prácticamente finalizada y sólo a la espera de las dos corridas de la Feria de San Miguel que finiquitarán dicho abono y, posiblemente, el año taurino de 2017.
De lo celebrado en la Maestranza dice Ramón Valencia estar muy contento en cuanto a los resultados artísticos, «nos ha costado lo suyo, una Feria que ha sido cara pero muy bien rematada. Como digo, estamos muy satisfechos en cuanto a los resultados artísticos. Sin embargo, nos queda un sabor agridulce porque teníamos una enorme ilusión en que el público asistiera, y ha habido días en que ese público no ha cumplido. Quizá sea cuestión de tiempo y de hacerlo poquito a poco, pero ya llevamos años esperando… Y habrá que estudiar el futuro».
También se refirió Valencia al número de corridas que le caben a la Feria de Abril. «No sería conveniente minorar carteles; perdería categoría la plaza. Sevilla debe tener un número de corridas mínimo y se debe mantener. Corridas con carteles generosos y que unos tapen a otros y, sobre todo, que sirvan para potenciar el abono». De todas formas, concluyó, «mucha culpa la tiene la economía del país».
En cuanto al festejo tradicional del 12 de octubre, que siempre cerró la temporada de toros en la Maestranza, Ramón Valencia no la tienes todas consigo en cuanto a su celebración. «Un festejo en esa fecha sería posible siempre y cuando se tratase de un acontecimiento especial, de otra manera no lo vemos posible. Muy difícil será recuperar esa fecha».
