REAL MAESTRANZA - Novillada fuera de abono

Nada

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1997

Tomás Angulo ha dado dos vueltas al ruedo, sin demasiado peso, tras lidiar mansos y descastados utreros de Yerbabuena. Fernando Adrián ha sido silenciado en ambos novillos. Luis Miguel Castrillón, que sustituyó al herido Pascual Javier, escuchó palmas en el tercero y fue silenciado tras finiquitar al sexto.

LA FICHA

NOVILLOS: Se han lidiado novillos de Yerbabuena, bien presentados, diferentes en hechuras, mansos y descastados. Mejor el cuarto.

NOVILLEROS: -Fernando Adrián, de barquillo y oro, silencio tras aviso y silencio tras aviso.

-Tomás Angulo, de azul y oro, vuelta tras petición y vuelta al ruedo.
Luis Miguel Castrillón (que sustituía al herido Pascual Javier), de tabaco y oro, palmas y silencio.
 
INCIDENCIAS: Un cuarto de plaza. Se guardó un minuto de silencio por el torero Ruperto de los Reyes y el empresario y apoderado José Luis Marca, ambos fallecidos recientemente. Parte facultativo de Luis Miguel Castrillón: «Cuadro de distensión en rodilla derecha sin que se aprecien signos de lesión articular y/o ligamentosa. Se practica vendaje antiinflamatorio tópico. Se aconseja estudio radiológico. Pronóstico leve». 


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Ruperto

Francisco Mateos
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VIDEO DE LA NOVILLADA

Manuel Viera.-

     La gente que acudió a los toros las noches de julio no lo hizo en esta otra noche de septiembre. Ni la motivación para sentarse en los tendidos de la Maestranza fue la misma ni los precios de las localidades tenían parecido a los de hoy. Así que los deseos de Pagés se han vuelto a ver truncados tras la paupérrima entrada que lucía la plaza, pese a lo liviano de la hora y a la apuesta de la programación en jueves. Ya se sabe, julio es julio, con sus novilladas de promoción y ‘fiesta’ en los tendidos, y no septiembre. Y para colmo la noche se hizo desesperante en el tiempo, y pesada con lo que sucedía en el ruedo. Nada.

     La novillada de Yerbabuena, descastada y mansa, tuvo muy pocas opciones para el triunfo. Novillos grandullones, feos de hechuras, que acometieron con genio a las cabalgaduras y toparon en las telas sin atisbo de calidad. Sólo el cuarto mostró nobles embestidas, aunque sin humillar y saliendo distraído de cada pase. Fernando Adrián lo supo entender dejándole la muleta muy adelantada, bajándole la mano e hilvanando los bien trazados muletazos diestros. También algún que otro natural pudo mostrar antes de que el utrero se quedase parado. Bernardinas para rematar y nuevo mitin con el descabello. El madrileño no se parece en nada a aquel novillero que sorprendió por su concepto del toreo en su presentación en esta plaza. Mantiene las formas, pero no la actitud. Se le ve aburrido, desmotivado, desconfiado.

     Así se comportó con el soso y rajado primero. Demasiadas dudas ante las complicadas y distraídas embestidas del novillo de Ortega Cano. Con los aceros, muy mal.


Los deseos de Pagés se han vuelto a ver truncados tras la paupérrima entrada, pese a lo liviano de la hora y a la apuesta en jueves. Ya se sabe, julio es julio, con sus novilladas de promoción y ‘fiesta’, y no septiembre 


       A Tomás Angulo le cogió el quinto de muy mala manera al entrar a matar. Se temió lo peor cuando se le vio prendido de los pitones. Segundos que se hicieron eternos hasta que el morlaco se lo echó a los lomos. Calló el novillo y calló el novillero, que dolorido se regaló una vuelta al ruedo que nadie pidió ni protestó. Antes, de forma extraña, se quedó en los medios con el capote y compás abierto para esperar la salida del utrero, cuando la plaza expectante lo creía encaminarse a portagayola. Suerte insulsa que no aportó nada de interés. No resulta fácil determinar si Tomás Angulo hizo fácil lo difícil o, al contrario, difícil lo fácil, sin llegar a ese punto medio de donde el toreo se hace emotivo, porque la faena transcurrió intermitente, desajustada y demasiado al hilo del pitón. Se paró el novillo sin que el extremeño pudiese repetir las calidades que dejó entrever en anteriores actuaciones en esta plaza.

     Con el brusco, violento y parado segundo lo intentó todo de igual manera. Trasteo demasiado pesado, despegado y sin entregarse demasiado a la causa. Sólo destacar el buen trazo de algún que otro natural. Lo mejor la estocada que motivó a sus partidarios para pedir la oreja y a él para da la vuelta al ruedo en ceremonioso paseo.

     Luis Miguel Castrillón, que sustituyó al herido y anunciado Pascual Javier, dejó muestras de su buen gusto en una serie de naturales trazados al descastado, aunque noble, tercero. Faena con altibajos pero en la que se pudo apreciar atisbos de calidad en la muleta del colombiano. Mejor con la izquierda que con la derecha, con la que consiguió ligar algún que otro muletazo diestro. Con el manso sexto puso todo de su parte sin conseguir su objetivo. Mató bien a su primero y le costó acertar con su segundo.


AL NATURAL

Ruperto

Francisco Mateos.-

     Me cuentan que esta tarde-noche se ha guardado un minuto de silencio en plena Maestranza en memoria de Ruperto de los Reyes. No merecía menos un hombre bueno como Ruperto de los Reyes. Lo he conocido tarde, pero me ha encantado tener la oportunidad de hacerlo. Tiene mucha historia Ruperto detrás, pero no ha sido hombre de darse a conocer. Siempre que lo recuerdo viene a mi memoria su alta y erguida figura con gente delante, ocupando siempre una fila trasera, sin querer destacar, ‘tapado’, como un niño tímido que necesita sentirse seguro y arropado. Y casi siempre me viene a la memoria su amigo Juan Murillo por delante, y él detrás, en esa segunda fila en la que se encontraba mucho más a gusto. Buenas tardes han pasado los dos allá arriba en el palco -cuando el palco era palco-, y mejores aún abajo en la calle, en el ‘antes de’ y el ‘después de’. Era de esos tipos que te analizan antes de darte tu aprobación para poder entrar en su restringido círculo, como cuando sale el toro y el diestro observa sus movimientos, el galope, las formas, las querencias,… así creo que radiografiaba Ruperto de los Reyes a las personas, y se dejaba guiar por su intuición torera, y elegía. No era hombre, ya digo, de arrancarse en la conversación; le gustaba oir. Venia ya de vuelta en la vida. Me hubiera gustado verle torear. Debió ser un auténtico científico del toreo, analizando cada detalle de la lidia. Pero no le gustaba destacar, y quizás por eso tampoco llegó a destacar demasiado en el toreo de luces. Se ha ido Ruperto de los Reyes. Un torero en la vida, un hombre bueno y un hombre generoso.


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Fernando Adrián.

Fernando Adrián.

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Tomás Angulo.

Tomás Angulo.

Tomás Angulo.

Tomás Angulo.

Tomás Angulo.

Tomás Angulo.

Luis Miguel Castrillón.

Luis Miguel Castrillón. Luis Miguel Castrillón. Luis Miguel Castrillón.

Luis Miguel Castrillón.

Apuros del picador.

Si le interesa alguna fotografía llame al 625 19 47 69 o diríjase a eduardo-lopez-matito.com

 


 

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