¿Por qué no se guardó un minuto de silencio en Sevilla por Paquirri?

Raúl Corralejo.-

     Ayer salió publicado en un diario de tirada nacional que la causa de que no se guardase un minuto de silencio en Sevilla en el aniversario de la muerte de Paquirri viene motivado por la falta de unanimidad de los matadores actuantes. Se apunta a que fue Morante, pero no se sabe a ciencia cierta. El presidente no ha manifestado cual fue el componente del cartel que decidió no hacerlo.

     Se podría estar hablando mucho tiempo sobre esto; creo que no beneficia a nadie. Es más: pienso que es una postura que parte literalmente por la mitad a muchos buenos aficionados. La respuesta sólo la saben ellos; nosotros tan sólo nos quedamos con el sentimiento de falta de sensibilidad, de falta de profesionalidad y falta de torería y gallardía. Juro que no sé quién fue el que se negó a ello; es más, no quisiera saberlo, me quitaría parte de mis argumentos con los que defiendo siempre a cada uno de estos dos torerazos. No estuve en la plaza, iba camino de la ciudad de la Alhambra, pero creo que si hubiese estado me hubiese salido de la plaza de toros y me hubiese ido a mi casa, pues el romanticismo, la pureza, el alma, el compañerismo, la admiración, el respeto que la gente que vestimos de luces tenemos hacia los compañeros fue tirada por los suelos.

     Si la negativa al minuto de silencio fue la superstición, no me la creo, porque ambos han guardado otras veces el minuto de silencio por otras personas. Admás, si ese fue el motivo podrían haberlo hecho de otra forma: hablar con el presidente y que se hiciese el paseillo sin música y desmonterados; no sé, algo que mantuviese el recuerdo de un gran torero y una gran figura del toreo que dio mucho a la Fiesta; tanto es así que dio su vida engrandeciendo aún más si cabe la grandeza de la Fiesta.

     Y ya que siempre la afición reclama su parte de importancia, me siento una vez más mal al comprobar que Sevilla está perdiendo sensibilidad. No se pronunció cuando no se guardó el minuto de silencio por Montoliú, ahora tampoco por Paquirri y no sé si se guardó por Soto Vargas el pasado día 13 (donde se unió la falta de sensibilidad de la empresa sevillana al anunciar en el cartel una novillada del Conde de la Maza, ganadería responsable de la desaparición del torero de Camas).

     No sé dónde va esto. Se está perdiendo lo que diferencia al mundo del toro, que no es otra cosa que el compañerismo, el respeto, el romanticismo, las formas, la tradición, los rituales,.. ¿Dónde vamos a parar? Sigamos dispersándonos y los abolicionistas tendrán una batalla más ganada.

     Partiera de donde partiera la negativa, perjudicó a la Fiesta de los toros.

*Raúl Corralejo es banderillero. Publicado en ambitotoros.

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