OPINIÓN.- En el banquillo: la Feria Mundial del Toro de Sevilla

0
1422

«…los verdaderos responsables de la zozobra sufrida por la Feria del Toro son, precisamente, los más directamente interesados en ella. Los que viven del toro y para el toro. Que no ponen un duro. Que no se gastan de sus bolsillos lo que deberían gastarse para que una cita de ese calibre sea el mejor escaparate de su negocio y la prueba palpable de que invierten en él para hacerlo más próspero…»


Dibujo: Calderón (ABC-Sevilla).

Redacción.-

     El periodista sevillano J. Félix Machuca publica en ABC de Sevilla su habitual juicio a una noticia de actualidad. En la edición de ayer domingo, sentaba en 'el banquillo' de los acusados a la Feria Mundial del Toro y su desconcertante situación durante las dos últimas semanas. El simulado 'juicio' es el siguiente: 

Cargo

     Se acusa a los agentes directamente relacionados con el mundo del toro de ser los responsables de la desestabilización sufrida por la Feria, al inhibirse de su apoyo económico, que podía haber dejado la ciudad para celebrarse en México.

Fiscal

     Lo peor de todo, señores del jurado, son las jeremiacas lamentaciones que hay que ver y registrar. Porque los verdaderos responsables de la zozobra sufrida por la Feria del Toro son, precisamente, los más directamente interesados en ella. Los que viven del toro y para el toro. Que no ponen un duro. Que no se gastan de sus bolsillos lo que deberían gastarse para que una cita de ese calibre sea el mejor escaparate de su negocio y la prueba palpable de que invierten en él para hacerlo más próspero.

     Y cuando digo el mundillo del toro no estoy escondiéndome en el eufemismo. En la palabrería barata que, por prudencia, desiste de nombrar a los verdaderos responsables. No, señores del jurado. Los responsables de que la cita internacional del toro de Sevilla en Fibes haya podido irse lejos, muy lejos de la ciudad que la supo crear de la nada y sacarla adelante son, apunten bien, ganaderos, empresarios y toreros. Asociados o por libre, igual da. Todos ellos están directamente interesados en mantener una cita como la de Fibes. Todos ellos viven o se benefician en el grado que sea del toro. Pues bien, en sus respectivas responsabilidades, ni uno de ellos suelta un duro para que la Feria no se vea perturbada por cuestiones presupuestarias.

     Hasta ahora, esta Feria, señores del jurado, ha salido adelante por la inversión pública y por la de Fibes, que ha venido asumiendo la pérdida originada por el evento. Si el presupuesto es de un millón trescientas mil euros, el dinero lo ponía sobre la mesa la Administración autonómica, un esponsor crediticio, la recaudación por entradas y la recaudación por stand. Fibes llegaba a donde no llegaban las sumas presupuestarias de estas partidas mentadas. Y así la Feria ha venido tirando y, a cambio, prestigiando internacionalmente la cita de Sevilla. Las dos ferias comerciales que ponen a Sevilla en el mapa son el Sicab y la del Toro. Y hemos estado a punto de dejar escapar la taurina por la irresponsabilidad, tacañería y falta de mentalidad emprendedora de un sector que no suelta un duro pero se lamenta, como la Zarzamora, por los rincones.

     Esta es la historia de la Feria del Toro. De la posible marcha de Sevilla a México de la Feria del Toro. El encogimiento de un sector que, no es que ya se muestre incapaz de alzar la voz contra los desafueros vascos y catalanes que se quieren cargar la Fiesta, sino que ha jugado con el fuego de la cita sevillana de Fibes por no rascarse el bolsillo. Pido mi condena más absoluta de tan cicatero mundillo.

Defensa

     Lo veo contundente, señor fiscal. Con la contundencia de unos argumentos que parecen irrebatibles. Pero creo que ha pisado demasiado a fondo el acelerador de su exposición. En otras palabras, señor fiscal, creo que se ha pasado tres pueblos. Y se ha pasado tres pueblos, señores del jurado, porque usted pasa por alto una consideración ineludible: si la forma de sufragar la feria es la que usted dice ¿por qué razón debe cambiarse ahora? ¿Por qué precisamente ahora se echa de menos al mundillo del toro cuando el mundillo del toro en esa Feria internacional ha jugado muy bien su papel? Sí, señor fiscal. El papel que le han dejado las instituciones. El papel de animador protagonista. ¿Por qué entonces ahora se quiere cambiar el guión y se pone el grito en el cielo diciendo que hay que variar la fórmula que sustenta económicamente a la Feria? ¿Se lo digo yo?

     Pues se lo digo. No hay dinero por ningún lado. Todo el mundo lo sabe. El dinero se ha acoquinado, está muerto de miedo y la primera loseta que nota un poco movida ahí mismo se esconde para no ver lo que está pasando. No hay dinero. Y el que lo tiene lo guarda con la llave del cofre del tesoro. Ni toros ni cabras. Dinero, señor fiscal. Dinero. Por eso se lanzó el SOS en una ciudad tan suya como es Sevilla. La mejor manera de lanzar el SOS fue esa: ojo, que si no hay dinero para la Feria del Toro, la Feria se monta en el barco y se va hasta México, que allí, al parecer, hay dinero suficiente para mantenerla y valorarla.

     Claro que estoy de acuerdo, señores del jurado, con parte del argumento del señor fiscal. Claro que resulta inconcebible que el sector directamente beneficiado por la Feria no ponga un duro para mantenerla. Pero no me negarán que la ocasión no es la más indicada. Habrá que torear la crisis, darle tres muletazos a la recesión y esperar a mejores tiempos para que el mundillo del toro se retrate. Yo estoy de acuerdo con usted, ese mundillo debería de retratarse en Fibes con una aportación razonable. Pero ahora no. Ahora precisamente no, señor fiscal. Que hay ganaderos que con dificultad llegan al dinero del pienso.

     Dicho esto no me queda otra lógica que pedir la absolución de ese mundillo del toro al que el fiscal acusa con tanta vehemencia. Y pido su absolución porque entiendo que se le pide su concurso cuando no pueden darlo.

SENTENCIA

     Este jurado de papel condena al mundillo del toro sin ningún tipo de atenuantes y entiende que su inhibición presupuestaria en la Feria Internacional del sector la ha puesto en peligro. Por lo tanto se les anima a que, en mesas petitorias, situadas estratégicamente en la ciudad, se sienten para pedir dinero como se hace con el Domund, habilitándose huchas de cabezas de reses famosas en cerámica de Santa Ana. Un poquito de por favor, señores…

NOTICIAS RELACIONADAS:

Dejar respuesta

16 − doce =