¡Vaya faena!

Diego Martínez.-

     La que nos hizo a los aficionados Victorino que elige los toros, la empresa que los compra y los toreros que los aceptan. Porque el producto que esta tarde ha salido por los chiqueros de la Maestranza eran sencillamente sieta cabras siete, algunas con más cuernos que otras. Este animal caprino es el que nos parece con mas semejanza a los lidiados esta tarde. Pero tranquilos que no pasa nada. La prensa habla de animales terciados o desiguales para enmascarar la realidad de un engaño al púbico y aficionado.

       Esto podemos decir con respecto a la presentación, pero es que si nos fijamos en el juego resulta que el resultado es aún peor. Animalitos descastados, con media o nula embestidas, peligrosos, en fín la antítesis de la verdadera casta brava. La empresa gana un dineral con la plaza a reventar. El ganadero el que más cobra y los toreros a justificarse con tres veronicas y una media de Morante. Mención aparte merece el paciente y sumiso público de Sevilla, que traga y traga todo lo que le echen. Ejemplo, el año pasado con Juan Pedro y este año dos tazas.

     Un interrogante que se hace el aficionado. El presidente manifiesta tras el primer reconocimiento que ha rechazado dos toros de Victorino, aunque uno de ellos lo quería volver a reconocer el día del festejo. Pues resulta que al final en el acta del orden de lidia que se expone al público no figura ningun toro rechazado. Exigimos una explicación de este cambio de criterio. ¿Existieron presiones? o ¿cuál fue el motivo?.  Esta Unión Taurina de Abonados al comenzar la temporada propuso a la Sra. Delegada del Gobierno de la Junta de Andalucía que el Sr. Fernandez Rey no volviera aocupar el palco de la Maestranza. Oidos sordos y esta tarde la responsable politica y administrativa de la Junta de Andalucía también es responsable del desaguisado.

*Diego Martínez es el presidente de la Unión Taurina de Abonados y Aficionados de Sevilla.